La calle del terror, parte 3: 1666 (2021)

Título original: Fear Street: 1666
Año: 2021
País: Estados Unidos / Canadá
Director: Leigh Janiak
Guion: Phil Graziadei, Leigh Janiak y Kate Trefry.
Reparto:
Kiana Madeira (Sarah Fier / Deena)
Benjamin Flores Jr. (Henry / Josh)
Ashley Zukerman (Solomon Goode / Nick Goode)
Gillian Jacobs (C. Berman)
Olivia Scott Welch (Hannah Miller / Samantha Fraser)

Sinopsis:
Deena completa el cuerpo de Sarah Fier, y tiene una regresión en la que se transporta a los primeros tiempos de Union, el asentamiento del que nacieron Shadyside y Sunnydale. De este modo conocerá en primera persona la verdadera historia de la bruja que se supone causa todas las desdichas de Shadyside. Allí conoce a todas las almas de Shadyside y Sunnydale, que parecen haber ido reencarnándose a lo largo de los años.

Sarah es una de las jóvenes del asentamiento, enamorada de Samantha Fraser. Pero su relación jamás sería comprendida por la comunidad católica del pueblo. Y, además, desde el momento en que durante una noche de fiesta alguien las descubre besándose, comienzan a ocurrir todo tipo de eventos siniestros en el pueblo. ¿Es su comportamiento lo que está causando este castigo divino, o hay fuerzas oscuras que se están despertando en Union?

Comentario:
La trilogía basada en los libros de R.L. Stine finalizaba un par de semanas después de la primera entrega con una doble historia que mostraba los orígenes de todo el universo planteado, y con la resolución de la historia principal planteada en la primera de las películas. Una mezcla que no terminar de casar, y que la coloca por debajo de sus dos antecesoras.

Leigh Janiak, que había hecho un gran trabajo creando el estilo personal de la saga, no consigue trasladarlo al siglo XVII, y nos deja una primera mitad bastante sosa, muy predecible, y con aspecto de telefilm que desmerece mucho todo lo creado hasta ese momento en la saga. Mejora un poco la segunda mitad, cuando volvemos a los años 90 originales, aunque la acción le gane demasiado terreno a la diversión de nuestro anterior paso por la época.

Una acción que no consigue tener el empuje y el ritmo de lo que se mostró antes. Sin referentes tan claros en los que apoyarse, sin los guiños a la cultura pop que se habían repetido hasta la saciedad… la cinta se queda en lo que las otras eran de base: historias demasiado simplonas. No falta algún buen momento, pero esta vez no nos parece suficiente.

Deja un poco mal sabor de boca que la trilogía, rodada de forma consecutiva, haya ido de más a menos. Como si Janiak hubiese llegado a esta parte ya un poco cansada del proyecto. Si con cada entrega anterior nos iban quedando ganas de ver más, con ésta quedamos satisfechos, y con la sensación de que La calle del terror quizá tenía menos que ofrecer como franquicia de a lo que apuntaba en un principio. Seguramente lo comprobaremos pronto con algún spin-off.