
Para los realizadores, la enorme popularidad de las armaduras de Iron Man tras la primera entrega era algo agridulce debido al fallecimiento del legendario experto en maquillaje para efectos especiales Stan Winston, cuya empresa creó los icónicos trajes.
“He trabajado dos veces con Stan Winston y nos hicimos íntimos amigos”, dice Jon Favreau. “Cuando falleció fue muy triste. Cuando vi cuánta gente importante de Hollywood hablaba en su funeral, comprendí que era una parte integral de la realización en la revolución tecnológica que había conseguido que las películas se dispararan en términos de escala, envergadura y ambición en cuanto a lo que se puede crear en la pantalla”.
El director continúa: “Stan no era sólo un marionetista práctico, sino que también hacía trabajo práctico mezclado con imágenes generadas por ordenador. Creo que Jurassic Park sigue siendo unos de los hitos de lo que era posible con imágenes generadas por ordenador y de cómo hacerlo lo mejor posible. Gran parte de eso era obra y diseño suyo”.
“Una de las claves para el éxito de la primera película fue que el traje de Iron Man era una pieza creíble de tecnología y hardware avanzados”, dice el productor Kevin Feige. “No era un traje mágico ni un ropaje con superpoderes. Estaba hecho a base de sangre, sudor y lágrimas de un personaje y realmente tenía el aspecto de un aparato tecnológico pulido, soldado y atornillado. Lo que los espectadores vieron en la pantalla fue una combinación fantástica del trabajo digital de ILM combinado con el trabajo práctico del equipo de Stan Winston. Stan era el mejor de su especialidad, un auténtico genio. Para Iron Man 2, volvimos a contar con Shane Mahan, quien está continuando con el legado de Stan bajo la nueva marca de la empresa, Legacy Effects. Shane y su equipo de técnicos llegaron a la primera reunión con un plan excelente para los trajes prácticos de esta película”.
Para Mahan y su equipo de artistas, volver a trabajar en la secuela no era ni mucho menos aquel proceso de prueba y error que vivieron al diseñar los trajes para la primera película. “En Iron Man, hubo un duro proceso de aprendizaje y una larga fase experimental para determinar cómo hacer el traje”, explica Mahan. “La principal pauta que Marvel nos dio en la primera película fue que Iron Man nunca pareciera simplemente un tipo con un traje. Aunque se han creado estupendos trajes así en el pasado, lo que los realizadores querían era tomar las proporciones del personaje de los cómics y darles vida. Para mi equipo, era un reto monumental construir un traje completo que tuviese las proporciones correctas, porque sencillamente no hay ningún ser humano que tenga unos hombros anchos y grandes, unas caderas diminutas y una cabeza del tamaño de la que teníamos que meter en el casco. Después de algunas modificaciones del traje, pudimos encontrar algunos especialistas con talento que eran muy atléticos y fueron capaces de encajar en el traje”.
Mahan continúa: “En aquella época éramos Stan Winston Studios, así que obviamente han cambiado muchas cosas con su fallecimiento, pero tenemos el mismo equipo, el mismo impulso y la misma energía que teníamos en la primera película. Teníamos mucho menos tiempo para hacer los trajes de Iron Man 2, pero esta vez conocíamos mucho mejor el terreno. Los realizadores querían que la armadura fuera más ligera y más rápida de poner y manejar para Robert”.

Otra decisión que tomaron los realizadores y Mahan fue que, durante la producción, las armaduras de Iron Man que iba a llevar Downey serían sólo medio traje, permitiendo al actor moverse con mayor naturalidad. “El gran rompecabezas que Shane tenía que resolver era cómo conseguir las proporciones del traje y a la vez hacer que fuera cómodo de llevar para los actores y especialistas”, dice el productor ejecutivo Louis D’Esposito. “Colaboramos estrechamente con Shane y el equipo de Legacy y se nos ocurrió la idea de un uniforme de rugby, en donde ponerse la armadura era como ponerse un par de hombreras. Esto no sólo mantenía las proporciones, sino que también lo hacía cómodo para llevarlo puesto. La razón por la que quitamos las piernas fue porque hacían muy difícil conseguir el movimiento correcto y el realismo fotográfico que necesitábamos”.
“Esta vez amoldamos las proporciones a la forma correcta, porque teníamos que lograr que encajara en la anatomía de Robert”, dice Mahan. “No se pueden falsear las proporciones o la perspectiva para ocultar algo. Todo iba a ser visible, y estaba hecho de manera que Robert se pudiera poner el traje de cintura para arriba. Pero las otras proporciones de cintura para abajo también eran correctas, y creo que fue realmente una estupenda mezcla de lo práctico y lo digital porque las empresas digitales podían tomar la pieza física y de tamaño real, escanearla y utilizar eso como base para su modelo informatizado”. “Es realmente asombrosa la rapidez con la que Mahan y su equipo fueron capaces de construir el traje”, dice Favreau. “Hicieron los trajes más ligeros y con materiales más flexibles y maleables. Los trajes prácticos no sólo influyeron en lo que hicimos digitalmente, sino que también nos permitieron filmar a Robert con el traje puesto, lo que da la sensación de que Tony Stark realmente lleva puesto el traje. No queríamos perder eso de vista nunca, porque Tony es la auténtica estrella de la película y Iron Man es un alter ego”.
“Cuando Robert se puso ese traje, éste cobró vida, y aprendimos mucho del personaje que alberga”, observa la coproductora Victoria Alonso. “Si no se contara con ese traje práctico para que Robert se lo ponga, por muy buenos que fuéramos con los gráficos por ordenador, no lo conseguiríamos. Así que intentábamos que fuera siempre algo vivo y práctico, y cuando no podíamos, intentábamos crear una referencia práctica para poder igualarla o aumentarla. Robert se ponía el medio traje y llevaba un traje de captación de movimientos de cintura para abajo con unas marcas de seguimiento para que pudiésemos captar sus movimientos. Era parecido a estar en una fase de captación de movimientos, pero estábamos captando la realidad del torso de Robert Downey con el traje pùesto”.
Al explicar los desafíos y la evolución del traje de Iron Man, el productor Feige dice que “al idear el diseño de los trajes de Tony para esta película queríamos seguir con lo que había funcionado y estaba ya definido para nosotros durante años en los cómics de Iron Man, y que son en realidad dos cosas. Primera, Tony está siempre mejorando sus trajes con nuevas ideas y aparatos. Segunda, la icónica cara roja y dorada de Iron Man queda más o menos igual. Así que necesitábamos diseñar trajes que siguieran siendo unos iconos de Iron Man, pero que al mismo tiempo evolucionaran con la historia que estábamos contando. Tony empieza la película con el Marca IV, que todavía tiene el icónico transmisor circular, pero si se lo compara detenidamente con el Marca III, es más esbelto, más dinámico, y tiene muchos más aparatos. Pero sigue siendo, indudablemente, Iron Man”.
“Al diseñar el Marca IV, cambiamos los brazos y los hombros, pero el mayor cambio fue en las piernas”, dice el ilustrador principal de trajes, Ryan Meinerding. “Queríamos añadirle una postura más humana a las piernas desde una perspectiva frontal. Lo que hicieron con el Marca III fue realmente genial, porque las piernas eran muy lineales y daban la sensación de que estaban ahí para propulsarle y volar. Aún así, nos parecía que para algunas secuencias de acción probablemente vendría bien tener un poco más de gestos, hacer las posturas más dinámicas. También queríamos hacer más delgadas las hombreras en el Marca IV para que pareciera más avanzado tecnológicamente al contrario que las hombreras como de rugby. Sobre todo, el principal objetivo al diseñarlo era hacer que pareciera un poco más esbelto y aerodinámico”.

Uno de los nuevos retos de Iron Man 2 era idear, diseñar y construir el traje para Whiplash, el nuevo archienemigo de Tony Stark. El coproductor Latcham explica la evolución del aspecto del personaje: “Nos encantaba el personaje de Whiplash, pero en el cómic parecía un tipo sadomasoquista vestido de negro y con todas esas hebillas y una cremallera en su boca, lo cual no era lo que en realidad buscábamos”, explica Latcham. “En lugar de eso, decidimos coger el personaje y hacer algo nuevo para que pareciese más una parte del mundo de Iron Man. Ryan Meinerding es unos de los artistas conceptuales con más talento de todo el sector, y nos pareció que sería una idea genial que diseñara un traje para Whiplash que pudiera haber sido fabricado en una cueva a partir de un montón de chatarra, justo como Tony había construido el suyo estando en cautividad”.
“Con Whiplash, era un poco difícil seguir las directrices del cómic real porque no es exactamente un icono del diseño”, dice Meinerding. “Ciertamente queríamos añadirle algo de realismo al personaje, así que empezamos de una forma muy cercana a como lo hicimos con Tony, pero con una especie de transmisor médico de baja calidad implantado en el pecho. Jon era partidario de eso, pero parecía demasiado que se hiciera una cirugía a sí mismo, así que evolucionó hacia un diseño más bien de exoesqueleto. A todo el mundo le gustó esa idea, y partiendo de ahí hablamos con Jon para averiguar los daños que iba a tener que soportar, porque era un sutil equilibrio entre intentar entender cuánto exoesqueleto necesitábamos ponerle y cuán protegido tenía que estar”.
Para Meinerding, la incorporación de Mickey Rourke en el papel de Whiplash también influyó en el diseño conceptual del traje: “Siempre pensamos que el personaje iba a ser ese malvado preso ruso, que es el arquetipo que seguí en los primeros diseños”, recuerda Meinerding. “Cuando nos enteramos de que iba a ser Mickey Rourke, ciertamente le aportó mucho al diseño. Terminé por hacer un nuevo esbozo de Mickey como el personaje, lo cual le añadió una dimensión completamente nueva y realmente cruda y sombría”.
“Lo que hizo que Mickey sintonizara de verdad con la película fue una obra de dibujo conceptual de Ryan”, apunta Latcham. “Cuando Jon y Kevin Feige se reunieron con Mickey por primera vez, le mostraron dos obras conceptuales de dibujo y le dijeron: ‘Queremos que hagas este personaje’. Cuando Mickey vio el dibujo con los tatuajes y correas y los pantalones chamuscados, pensó que era auténticamente genial, y el arte de Ryan fue realmente importante a la hora de convencer a Mickey para que hiciera la película”.
Con el diseño conceptual listo, se pasó el testigo a Shane Mahan y su equipo para que construyeran el traje real que Mickey Rourke iba a llevar en el plató. “Ryan nos dio los diseños para Whiplash y hablamos con Jon y lo interpretamos con un estilo más antiguo y un aspecto más ruso, con un cinturón de cuero como el que llevan los electricistas pero con un aspecto más crudo”, explica Dave Merritt, coordinador de Legacy Effects. “También le añadimos un puñado de piezas modeladas para darle un aspecto más futurista”. Para Rourke, el traje de Whiplash tenía un aspecto genial pero no era muy fácil de llevar durante largos períodos de tiempo. Pero descubrió la manera de hacerlo funcionar. “Construyeron un traje que tenía un aspecto genial, algo que me gustó mucho porque en realidad no quería llevar puesto un traje completo”, dice. “Para mí, parte de su atractivo estaba en que era de cuero y piel, pero aún así pesaba cerca de 18 kilos sin contar los brazos. La primera vez que me lo puse, dije: ‘Esto no va a funcionar’, porque era tan pesado y voluminoso que me quedaba exhausto después de haberlo llevado puesto durante sólo unos pocos minutos. Así que trabajé con mi entrenador unas siete semanas, andando en una cinta durante 45 minutos con un chaleco de 18 kilos a mis espaldas para que no me quedara exhausto cada vez que me ponía el traje”.

Otra incorporación que hace su primera aparición en Iron Man 2 es la esperadísima presentación de la armadura llamada Máquina de Guerra que lleva puesta Rhodey en la película. “En esta película, sabíamos que queríamos que Rhodey se pusiera el Marca II, que se convertiría en la base de la armadura llamada Máquina de Guerra”, dice Favreau. “La tensión entre Rhodey y Tony va en aumento, y finalmente Rhodey se da cuenta de que está siendo demasiado buen amigo y de que no está defendiendo los intereses de su país. Tony está siendo irresponsable y eso es peligroso. A Rhodey le parece que alguien va a acabar resultando herido, y es entonces cuando le quita el Marca II a Tony. Esa acción nos dio la oportunidad de desvelar la versión plagada de armas del traje de Iron Man que es la Máquina de Guerra”.
“Hay muchos looks diferentes para todos los personajes de nuestros cómics a lo largo de los años, y nosotros escogemos los que nos parecen más característicos”, dice Feige. “Desarrollamos un estilo para los trajes en la primera película, y queríamos continuarlo en la segunda. Cómo de voluminosos podíamos hacerlos, cuántas armas podíamos meterles y que aún pareciera que cualquiera podría moverse con ellos puesto, esos eran nuestros mayores desafíos, pero cuando se tiene a Industrial Light & Magic y Legacy Effects para que les den vida, es un enorme placer ver cómo se va acoplando todo. Hay una gran diferencia entre la silueta de Iron Man y la silueta de Máquina de Guerra, y tenían que tener sus distintos caracteres. Incluso cuando las máscaras están cerradas, uno quiere sentir las diferentes caracterizaciones y las diferencias entre los dos”.
“Máquina de Guerra está construido sobre la base del Marca II, pero Rhodey y los militares no cuentan con Tony Stark para que lo adapte, así que no tiene la genialidad técnica de Tony para hacerlo más esbelto y lograr que salgan los misiles”, añade el productor ejecutivo D’Esposito. “No intentan tener un aspecto genial, intentan ser eficaces, y Justin Hammer termina por equiparle con algunas de las mayores armas que se hayan visto jamás, al más puro estilo de la Máquina de Guerra de los cómics. Para Máquina de Guerra, no importa tanto la elegancia y el ingenio del diseño sino colocar un arma gigante en un hombro, un paquete de misiles en el otro y grandes cañones del calibre 50 en los antebrazos, y a ver qué pasa”.
“En esta película amortizamos a Máquina de Guerra a lo grande, directamente como en los cómics”, concluye Favreau. “La conversión de Rhodey en Máquina de Guerra es unos de los momentos más geniales de la película, y la respuesta de los fans a Don Cheadle ha sido asombrosa”.
Con Máquina de Guerra y las otras armaduras de Iron Man 2, el producto final en la pantalla empieza con elementos reales y prácticos que proporcionan un lienzo creativo para los técnicos de efectos visuales, que tienen un inmenso talento. “Siempre ha sido muy importante para Jon y para mí el hecho de no hacerlo todo mediante imágenes generadas por ordenador”, dice Feige. “Hay una broma muy habitual en el plató acerca de simplemente ‘apañarlo en posproducción’. Aunque hoy en día se pueden componer muchas cosas en posproducción, una de las razones por las que diseñamos el atuendo de Whiplash como lo hicimos fue porque queríamos ver a Mickey Rourke llevando puesto físicamente el traje. Tenemos coches de verdad, fuego de verdad, explosiones de verdad y luchas coreografiadas de verdad”.
En esta categoría
Festival de Sitges 2022
El uso del zombi como construcción metafórica en la ficción televisiva. El caso de In the Flesh.
El diseño de Free City